Tendencias que se proyectan para este año.

En el último tiempo, y sobre todo tras desatarse la pandemia, se han trastocado nuestras creencias y proyecciones respecto de distintas cuestiones económicas. Por ejemplo, la crisis actual ha ocasionado una fuerte necesidad de invertir, tal como se ha reflejado con la fiebre de la inversión bursátil a través de plataformas digitales.

Si hay algo de lo que se pueda estar seguro en cuanto a inversión es a la certidumbre que entregan las propiedades como una buena alternativa frente a escenarios inciertos. Valentina Pardo, country manager de Tango Chile, explica cuatro tendencias de este sector que se afianza dentro de los inversionistas más avezados:

La compra de propiedades se mantendrá como inversión: Dado que en escenarios de incertidumbre los bienes raíces son un conveniente refugio, esta modalidad se estima que no decrecerá y permanecerá estable pese a escenarios negativos. El hecho de que este tipo de negocios se realice en UF, entrega una estabilidad fuerte a las propiedades porque este índice disminuye sólo cuando se produce una deflación (sucede cuando un menor consumo hace que el costo de vida baje).

Las propiedades son mucho menos volátiles como inversión, ya que los mercados tasan casas, departamentos o terrenos de acuerdo a muchas variables, entre las que se encuentran el valor del terreno, el valor mismo de la construcción, posibilidades de movilización, comercios cercanos, entre otros.

La construcción tendrá una desaceleración: Si bien la construcción se mueve en un escenario de largo plazo y el efecto del freno de créditos para inmobiliarias no es inmediato, ya se comenzará a ver una desaceleración en cuanto a desarrollo de nuevos proyectos.

La inversión local también puede tener un freno: La incertidumbre política y económica puede tener repercusiones para la inversión en distintas áreas. Sin embargo, siempre será atractivo invertir en viviendas por lo explicado en el primer punto.

Avance de las plataformas digitales: En todo ámbito de trámites llegaron para quedarse. La pandemia les dio un impulso más. La consolidación del modelo digital se extrapola a la búsqueda de propiedades, sector que está dejando de lado las corredoras tradicionales, y con ello los agendamientos de visitas, firmas, notarías y toda la burocracia que implica el formato presencial.

El futuro es digital y diferentes investigaciones nos lo han aclarado. De acuerdo con el estudio desarrollado por JMango 360, en Estados Unidos, pequeños minoristas independientes experimentaron un aumento de 58% en compras realizadas a través de sus aplicaciones en 2020. Y esto aumentará en el futuro, sin dudarlo.

Distintas son las posibilidades de invertir, en algunas de ellas la apuesta es riesgosa -ganar o perder- siendo totalmente impredecibles. No obstante, refugiar sus inversiones en propiedades o terrenos parece una buena posibilidad en la actualidad porque permite adquirir una deuda para posteriormente incrementar el capital de inversión que se realizó.

Este contenido se encuentra en Revista Click, edición N° 35

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